"A todos los extranjeros residentes legalmente que se han unido a las protestas pro-yihadistas, les advertimos: en 2025, los encontraremos y los deportaremos", escribió el presidente en una hoja informativa adjunta al decreto.
La orden insta a las universidades a vigilar las actividades de los estudiantes extranjeros y a las agencias federales a ayudar a las universidades a supervisar, investigar y potencialmente deportar a los estudiantes y al personal si infringen la ley durante manifestaciones pro palestinas.
Trump ha fijado un plazo de 60 días para que las agencias federales presenten informes de todas las presuntas violaciones de los derechos civiles desde el 7 de octubre de 2023, la fecha del ataque de Hamás a Israel.
La administración dice que los informes proporcionados por las universidades podrían conducir a "investigaciones y, si corresponde, acciones para expulsar a dichos extranjeros".
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