(ANSA) - BRASILIA, 14 MAR - El oficialista Partido de los
Trabajadores (PT) brasileño se manifestó preocupado tras las
multitudinarias protestas realizadas el domingo en más de 300
ciudades de todos los estados del país para exigir la salida de
la presidenta Dilma Rousseff y contra el ex mandatario Luiz Lula
da Silva. El presidente del PT, Rui Falcao, comparó el clima político
actual en el que la oposición convocó a actos multitudinarios
con el que precedió al golpe de Estado en 1964. "Me preocupa que la propia oposición que fomentó este acto
haya sido hostilizada en la Avenida Paulista", dijo Falcao en
referencia a que el líder del opositor Partido de la
Socialdemocracia Brasileña, Aécio Neves, fue abucheado por el
público. La concentración en la Avenida Paulista fue la mayor de la
historia, con 1,4 millones de participantes según la Policía
Militarizada y 450.000 de acuerdo con los cálculos de la
encuestadora Datafolha. En ese evento también fue impedido de hablar otro de los
máximos dirigentes opositores, el gobernador de San Pablo
Geraldo Alckmin, del Partido de la Socialdemocracia brasileña a
quien le gritaron "oportunista". El oficialista Rui Falcao declaró en la noche del domingo que
en 1964 grupos civiles "golpistas" apoyaron el derrocamiento del
presidente Joao Goulart suponiendo que se beneficiarían, y luego
para su sorpresa de esos grupos los militares permanecieron "21
años" en el poder y proscribieron a muchos que les dieron
respaldo. El PT, los campesinos sin tierra y otras organizaciones
sociales planean convocar a un acto en apoyo del gobierno y del
ex presidente Lula da Silva el próximo viernes también en la
Avenida Paulista, la más importante de la ciudad. Uno de los dirigentes nacionales de los sin tierra, Gilmar
Mauro, hizo un balance negativo de la concurrida movilización
opositora que atacó en primer lugar al gobierno pero también al
conjunto de la clase político, informó hoy el diario Folha de
San Pablo. "Después de lo que pasó con las marchas no podemos estar
contentos esto fue un acto contra la política", dijo Gilmar
Mauro. Otro miembro de los sin tierra, Juan Pablo Rodrigues, dijo
estar sorprendido porque en los actos del domingo no sólo hubo
clase media, "también se vieron muchos trabajadores"
manifestando su descontento con Rousseff.
DCP/MRZ
14/03/2016 13:24
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